Descripción
Un rompecabezas de cartas que te hará pensar
¿Buscas un juego de cartas que sea fácil de aprender pero que ofrezca un reto estratégico? Jungo es la elección perfecta. Este juego, con sus simpáticos monos de colores, esconde una mecánica brillante que te mantendrá al filo del asiento en cada turno.
El objetivo es sencillo: ser el primer jugador en quedarse sin cartas. Para lograrlo, debes jugar combinaciones de cartas del mismo valor. Pero aquí viene el giro que lo hace tan adictivo: no puedes cambiar el orden de las cartas en tu mano. Esto significa que cada carta robada o jugada altera tus opciones, forzándote a planificar tus movimientos con cuidado y a ser muy flexible.
La regla de oro del Jungo
En tu turno, puedes jugar una combinación de cartas adyacentes de tu mano. Si ya hay una combinación en la mesa, tu jugada debe superarla, ya sea con más cartas o con un valor más alto. Y aquí hay otra decisión clave: ¿tomas las cartas que superaste o las descartas? Tomarlas te da más opciones, pero también llena tu mano y puede complicar tus planes.
Además, si no puedes o no quieres jugar, puedes robar una carta. Pero, ¡cuidado! Con la “ley del Jungo” puedes jugar la carta robada inmediatamente si te ayuda a formar una combinación ganadora. Es un pequeño detalle que puede cambiar el curso de la partida por completo.
Jungo es el tipo de juego que se presta a partidas rápidas y reñidas, perfecto para una sobremesa o para llevar de viaje. Su arte vibrante y sus reglas sencillas lo hacen accesible para cualquier persona a partir de los 10 años. Pero no te dejes engañar por su apariencia amigable, la tensión aumenta a medida que los jugadores se quedan con menos cartas.
Estamos seguros de que Jungo se convertirá en uno de tus juegos favoritos. Es una mezcla perfecta de azar, estrategia y risas que te atrapará desde la primera partida. ¿Dominarás el arte del combo y te comerás tu plátano en paz?
Contenido:
72 cartas
1 reglamento






















































